Hoy es el día que
elegimos para celebrar ser canarios. La sociedad en la que vivimos
actualmente se ha centrado tanto en filosofias globalistas y
hedonistas que se han perdido muchos valores que nos han llevado a
ser lo que somos hoy día. Uno de esos valores es el sentido de
identidad tribal que se celebra en días como este. Se ha convertido
en algo casi políticamente incorrecto el sentrise orgulloso del
pueblo en el que uno nació, lo cual es alarmante a la par que
absurdo. El sentimiento de pertenencia a una familia, a un grupo o a
una tribu es lo que nos ha propiciado desarrollar la cómoda y
avanzada sociedad que vivmos hoy, con todas sus cualidades y
defectos, de las cuales son las cualidades las que destacan. No
importa a qué nación o cultura pertenezcas, todo individuo que
luche por una sociedad libre y próspera ha de tener en cuenta que el
amor a sus propias raíces es esencial para cumplir esos objetivos.
El respeto a las otras culturas ni siquiera es posible si no se ama a
la suya propia en primer lugar.
En el caso de los
canarios, hay una baja probabilidad de que seamos descendientes
directos de los pobladores originales de las islas, pero no se trata
sólo de continuar el legado genético de los antepasados, se trata
de amar la tierra que te acogió al nacer y conocer el pasado de los
que hicieron posible la historia de dicha tierra. Es por eso que
quisiera invitar a todos los canarios a amar su tierra, a pensar su
propia historia y mantener las tradiciones, no sólo hoy, sino todos
los días. Si han sacado hoy la bandera canaria por la ventana para
celebrar este día, manténgala ahí el resto del año. Aprendan todo
lo que puedan sobre su tierra, viajen a cada ricón de las islas, y
hagan saber al mundo todo lo bueno que hay en ellas para compartirlo
con él.
Cada cultura y cada lugar
tiene cualidades irrepetibles, así que es nuestra responsabilidad
conocerlas todas ellas y compartir ese amor a nuestra tierra con todo
el mundo conocido.
¡Feliz día de Canarias!